Las inversiones de impacto son unos nuevos activos financieros que combinan objetivos sociales/medioambientales y objetivos financieros.
Se calcula que este nuevo activo financiero tiene una oportunidad de inversión próxima a los 400 mil millones de dólares y un potencial de ganancias entre 183 mil millones y 667 mil millones dólares durante la próxima década.